Resumen ejecutivo
Sam Bankman-Fried (SBF), el fundador del ahora quebrado intercambio de criptomonedas FTX, afirmó recientemente que su error más grave durante el colapso de 8 mil millones de dólares de la plataforma fue ceder el control a la nueva gerencia, lo que, según él, frustró una posible inversión de rescate de última hora. Esta declaración llega mientras FTX continúa su arduo proceso de pagar miles de millones a los acreedores afectados, con su actual CEO, John Ray III, refutando enérgicamente la narrativa de SBF.
El evento en detalle
Sam Bankman-Fried, actualmente cumpliendo una condena de 25 años de prisión por siete cargos de delitos graves relacionados con el colapso de FTX y Alameda Research en noviembre de 2022, declaró en una entrevista que su principal error fue entregar el liderazgo de FTX a John J. Ray III el 11 de noviembre de 2022. Bankman-Fried afirma que minutos después de firmar la cesión de control, recibió una llamada sobre una posible inversión externa que podría haber salvado la empresa, pero ya era demasiado tarde para revocar su firma. Andrew Dietderich, un abogado de Sullivan & Cromwell (S&C), había propuesto nombrar a Ray como Director de Reestructuración dos días antes de la solicitud de quiebra de FTX el 9 de noviembre. Ray posteriormente solicitó la quiebra del Capítulo 11 el 11 de noviembre de 2022 y contrató a S&C para asistencia legal en los procedimientos.
Mecanismos financieros y estrategia de negocio
Sullivan & Cromwell recomendó a John Ray III para el rol de reestructuración, con comunicaciones internas indicando que era considerado "el hombre de S&C". La posición de Ray evolucionó rápidamente de Director de Reestructuración a Director General, suplantando efectivamente a SBF. El cambio de título ocurrió cuando los abogados de S&C comenzaron a comprender la "profundidad del problema" en FTX. John Ray III ha deconstruido rigurosamente las afirmaciones de SBF con respecto a la solvencia del intercambio. Ray reveló que en el momento de la quiebra, FTX solo tenía 105 Bitcoins (BTC) frente a los derechos de los clientes de casi 100.000 BTC. Atribuyó este déficit masivo a la malversación de fondos de los usuarios por parte de SBF, que fueron desviados para cubrir pérdidas comerciales en la empresa hermana Alameda Research, una situación a la que se hace referencia como la "brecha de Alameda". Estos fondos de clientes también fueron supuestamente utilizados para artículos de lujo, empresas especulativas y otros gastos inapropiados, formando parte de lo que Ray describió como una "empresa criminal en expansión".
Implicaciones para el mercado
El colapso de FTX desencadenó una cascada de quiebras en toda la industria de las criptomonedas, contribuyendo a uno de los mercados bajistas más largos del sector, con los precios de Bitcoin cayendo hasta los 16.000 dólares. A pesar de la agitación inicial, la masa de FTX ha logrado un progreso significativo en la recuperación de activos y el pago a los acreedores. La masa ha distribuido 7.800 millones de dólares a través de tres series de pagos, siendo el último en septiembre un total de 1.600 millones de dólares. Los acreedores aún esperan más de 4.200 millones de dólares, ya que se estima que FTX ha recuperado hasta 16.500 millones de dólares en activos. El plan es reembolsar al menos al 98% de los clientes el 118% del valor de sus cuentas a noviembre de 2022. Este proceso de reembolso continuo es crucial para restaurar la confianza de los inversores en los intercambios centralizados y el ecosistema Web3 más amplio, demostrando que incluso después de fallas importantes, la recuperación de activos y la compensación son posibles.
Comentario de expertos
John Ray III ha refutado directamente la narrativa de SBF, calificando sus declaraciones de "categórica, cruel y demostrablemente falsas". Ray enfatizó que los usuarios de FTX "nunca estarían en la misma posición en la que habrían estado si no se hubieran cruzado" con Bankman-Fried. Cuestionó explícitamente el Bitcoin faltante y afirmó que el robo de estos activos por parte de SBF impidió la devolución en especie de las criptomonedas a los clientes. Ray ha atribuido la dedicación de los profesionales que trabajan bajo su dirección a la transformación de lo que denominó un "incendio de basurero" en un proceso que se acerca a un plan de reorganización que promete rendimientos significativos. Destacó que los activos robados y convertidos en otras formas, como inversiones en bienes raíces en las Bahamas u otras criptomonedas, se recuperaron con éxito gracias a estos esfuerzos.
Contexto más amplio
Las afirmaciones de SBF, hechas desde prisión, representan un intento de reformular la narrativa en torno a la caída de FTX, sugiriendo que podría haber evitado la quiebra si hubiera conservado el control. Sin embargo, estas afirmaciones chocan fuertemente con los hallazgos oficiales y los esfuerzos en curso de la gerencia actual. El enfoque sigue estando en el trabajo meticuloso de recuperación de activos y el eventual reembolso total a los clientes afectados, subrayando las graves consecuencias de la malversación inicial de fondos y la importancia de una supervisión sólida en el espacio de los activos digitales.
fuente:[1] SBF: El mayor error durante la quiebra de FTX fue ceder el control de la empresa a la nueva dirección (https://www.techflowpost.com/newsletter/detai ...)[2] Bankman-Fried dice que su mayor error fue entregar FTX al nuevo CEO antes de la quiebra (https://vertexaisearch.cloud.google.com/groun ...)[3] Sam Bankman-Fried y el drama multimillonario sobre las ruinas de FTX - Mother Jones (https://vertexaisearch.cloud.google.com/groun ...)