Resumen ejecutivo
Iris Energy (IREN), un operador de centros de datos de minería de Bitcoin y computación de alto rendimiento (HPC), experimentó una caída del 4,2% en sus acciones en las operaciones posteriores al cierre tras el anuncio de una oferta privada de 875 millones de dólares en bonos senior convertibles. La oferta, que podría ascender a 1.000 millones de dólares si los compradores iniciales ejercen su opción por 125 millones de dólares adicionales, tiene como objetivo financiar las operaciones corporativas generales, incluidos los gastos de capital, y mitigar la posible dilución de acciones mediante transacciones de opciones de compra con tope.
El evento en detalle
IREN anunció una oferta privada de 875 millones de dólares de importe principal agregado de bonos senior convertibles con vencimiento en 2031. Estos bonos son obligaciones no garantizadas y vencerán el 1 de julio de 2031, a menos que sean recomprados, rescatados o convertidos con anterioridad. Los intereses se pagarán semestralmente. Los tenedores de bonos poseerán derechos de conversión bajo condiciones específicas, lo que permitirá a IREN la flexibilidad de liquidar las conversiones en efectivo, acciones ordinarias o una combinación de ambas. El tipo de conversión inicial se establece en 73,3229 acciones ordinarias por cada 1.000 dólares de importe principal de los bonos, lo que corresponde a un precio de conversión inicial de aproximadamente 13,64 dólares por acción ordinaria. Este precio de conversión representa una prima de aproximadamente el 30% sobre el último precio de venta informado de 10,49 dólares por acción a fecha de 10 de junio de 2025.
La empresa también ha celebrado transacciones de opciones de compra con tope, que se espera que proporcionen una cobertura contra las conversiones hasta un precio máximo inicial de 20,98 dólares por acción, lo que representa una prima del 100%. Además, IREN realizó una transacción de compra anticipada de acciones para adquirir aproximadamente 92,5 millones de dólares de sus acciones ordinarias, con el objetivo de facilitar las transacciones de derivados para los inversores que cubren sus inversiones en bonos.
Implicaciones para el mercado
La reacción inmediata del mercado al anuncio fue una caída del 4,2% en el precio de las acciones de IREN. Este sentimiento negativo a corto plazo a menudo acompaña a las ofertas de deuda convertible debido a las preocupaciones sobre la posible dilución futura de acciones. Sin embargo, la asignación estratégica de los ingresos, en particular hacia las transacciones de opciones de compra con tope, tiene como objetivo explícito gestionar esta dilución. La captación de capital también es fundamental para la expansión de IREN en los sectores de la computación de alto rendimiento y la inteligencia artificial (IA). La empresa ha conseguido nuevos contratos de servicios en la nube de varios años para despliegues de NVIDIA Blackwell GPU, proyectando unos ingresos anualizados de más de 500 millones de dólares de aproximadamente 23.000 GPU para finales de 2025. Este movimiento alinea a IREN con una tendencia creciente entre los mineros de Bitcoin para diversificar las fuentes de ingresos más allá de la pura minería de criptomonedas, aprovechando la infraestructura energética existente para las cargas de trabajo de IA. Otras empresas, como Coinbase, han utilizado de manera similar los bonos senior convertibles; Coinbase anunció una oferta privada de 2.000 millones de dólares de dichos bonos para apoyar fines corporativos, incluidas adquisiciones y transacciones de opciones de compra con tope.
Contexto más amplio
La oferta de bonos convertibles de IREN y su giro estratégico hacia la IA/HPC reflejan un cambio significativo dentro de la industria de la minería de Bitcoin. Tras el halving de Bitcoin, que redujo las recompensas por bloque, muchos grandes operadores están buscando fuentes de ingresos alternativas y estabilización financiera. El arrendamiento de huellas energéticas para clientes de IA y HPC ha surgido como una estrategia clave. Este modelo se evidencia en el acuerdo de 10 años y 3.000 millones de dólares de Cipher Mining con Fluidstack, financiado parcialmente por Google, y los acuerdos de alojamiento de TeraWulf para más de 200 megavatios dedicados a cargas de trabajo de IA, estimados en más de 3.700 millones de dólares. Estos contratos a largo plazo introducen un nuevo perfil de riesgo para las acciones de los mineros, ofreciendo pagos estables denominados en dólares que pueden reducir la exposición a la volatilidad del precio de Bitcoin. La capacidad de asegurar capital a través de instrumentos como los bonos convertibles, garantizados por contratos de IA a varios años, permite la expansión de la infraestructura en diversas condiciones de mercado, yendo más allá de la dependencia tradicional de la financiación del mercado alcista. Esto sugiere un futuro en el que las acciones de los mineros pueden evolucionar hacia empresas híbridas, combinando ingresos vinculados a materias primas con ingresos por servicios contratados, en lugar de ser únicamente proxies de alta beta para los precios de Bitcoin. El cambio también puede influir en la tasa de crecimiento de la tasa de hash general de la red Bitcoin si se redirige más capacidad al alojamiento externo.
fuente:[1] IREN cae un 6% tras la oferta de bonos convertibles de 875 millones de dólares (https://www.coindesk.com/markets/2025/10/07/i ...)[2] Las acciones de Iris Energy caen tras anunciar una oferta de bonos convertibles de 875 millones de dólares (https://vertexaisearch.cloud.google.com/groun ...)[3] Coinbase planea una venta privada de bonos de 2.000 millones de dólares para impulsar su estrategia de expansión - CoinCentral (https://vertexaisearch.cloud.google.com/groun ...)